Se quedan mirando juntos la
película que Pau había estado mirando antes, mientras charlaban de lo que les
pasaba y de cómo seguirían.
Pau: Jose ya sabe del beso del otro día, porque ella sabía que me gustas (seguía poniéndose bordo cada vez que revelaba sus sentimiento), no se lo podía ocultar. Pero nadie más sabe nada.
Pedro: yo solo le dije a mi prima Rocío porque fue la que me abrió los ojos. Y a nadie más tampoco.
Pau: y a mí me parece mejor que no le digamos a nadie más, ¿no? Digo... De esto que paso... Porque por ahí lo querés dejar acá.
Pedro: no Pau, para. ¿En serio pensás eso? O sea si te di esos besos y te dije todo lo que sentía no es para volver a guardarlo todo en un cajón bajo 7 llaves, y que sigamos como si nada. Sé que hay una amistad de por medio y todo eso, y no la voy a arruinar por una simple calentura de una noche. Yo estoy dispuesto a jugármela por vos. Quiero que intentemos algo, si vos querés... Obvio.
Pau: No dejas de sorprenderme. Tenía miedo de que hagas todo esto por querer olvidar a Jesica, o algo así. No quería ilusionarme y terminar sola como siempre.
Pedro: (abrazándola) Ay no Pau. Jamás podría hacer eso con vos, si sabes que te quiero un montón. No podría jugar así con tus sentimientos. Entonces, ¿no querés que sigamos?
Pau: Em... Si. (Escondiendo su cabeza en el hombro de él)
Pedro: bueno, pero ¡¡la vergüenza dejémosla a un lado!! Dale, si nos conocemos desde los 15 años más o menos.
Pau: si, tenés razón, es que es raro.
Pedro: ya nos vamos a acostumbrar, ¿no? (dice guiñándole un ojo)
Al terminar la película que estaban mirando Pedro se despide (por supuesto que ahora con un pico) y se va a su casa a dormir.
Pau se acuesta a intentar dormir pero no podía dejar de soñar despierta, con Pedro y lo que había pasado esa noche. Realmente estaba muy feliz, y con una sonrisa tatuada en su rostro logra dormirse.
Pau: Jose ya sabe del beso del otro día, porque ella sabía que me gustas (seguía poniéndose bordo cada vez que revelaba sus sentimiento), no se lo podía ocultar. Pero nadie más sabe nada.
Pedro: yo solo le dije a mi prima Rocío porque fue la que me abrió los ojos. Y a nadie más tampoco.
Pau: y a mí me parece mejor que no le digamos a nadie más, ¿no? Digo... De esto que paso... Porque por ahí lo querés dejar acá.
Pedro: no Pau, para. ¿En serio pensás eso? O sea si te di esos besos y te dije todo lo que sentía no es para volver a guardarlo todo en un cajón bajo 7 llaves, y que sigamos como si nada. Sé que hay una amistad de por medio y todo eso, y no la voy a arruinar por una simple calentura de una noche. Yo estoy dispuesto a jugármela por vos. Quiero que intentemos algo, si vos querés... Obvio.
Pau: No dejas de sorprenderme. Tenía miedo de que hagas todo esto por querer olvidar a Jesica, o algo así. No quería ilusionarme y terminar sola como siempre.
Pedro: (abrazándola) Ay no Pau. Jamás podría hacer eso con vos, si sabes que te quiero un montón. No podría jugar así con tus sentimientos. Entonces, ¿no querés que sigamos?
Pau: Em... Si. (Escondiendo su cabeza en el hombro de él)
Pedro: bueno, pero ¡¡la vergüenza dejémosla a un lado!! Dale, si nos conocemos desde los 15 años más o menos.
Pau: si, tenés razón, es que es raro.
Pedro: ya nos vamos a acostumbrar, ¿no? (dice guiñándole un ojo)
Al terminar la película que estaban mirando Pedro se despide (por supuesto que ahora con un pico) y se va a su casa a dormir.
Pau se acuesta a intentar dormir pero no podía dejar de soñar despierta, con Pedro y lo que había pasado esa noche. Realmente estaba muy feliz, y con una sonrisa tatuada en su rostro logra dormirse.
Al otro día en la mañana Rocío
despierta a Pedro con el desayuno en la cama.
Rocío: Último día de consentido
tenés, eh.
Pedro: Ay sí. ¡Voy a extrañarte
mucho!
Rocío: ¡Por los desayunos y porque
te ayudo en todo no más, ¿no?! ¡Que caradura!
Pedro: (Abrazándola) ¡Noooo! Porque
te adoro y por tus consejos. Te quiero prima.
Rocío: ¡Que tierno estas! La flaca
te hace bien.
Pedro: La verdad que si, no te lo
puedo negar. Cada día la quiero más. Pero nada a nadie de la familia eh. Que
por ahora lo mantenemos en privado, así si no funciona después no nos sentimos
tan incomodos, ni hacemos sentir incomodos a otros que nos quieran invitar a un
mismo lugar a los dos.
Rocío: Ay lo piensan mucho… Para mí
que re va a funcionar, son hermosos y buenas personas los dos. Yo les deseo lo
mejor.
Pedro: Gracias Ro. Sos lo más.
La lleva al aeropuerto y manda
saludos a todos sus parientes del sur prometiendo una pronta visita.
Pedro: Tal vez en las vacaciones de
invierno me aparezco por allá.
Rocío: Y espero que con Pau.
Pedro: ¡No paras eh!
Rocío: ¡Ay es que son tan lindos
juntos! (Risas)
Pedro: Bueno, dale anda, que perdés
el vuelo.
Rocío: Gracias por estos días
primo, por hospedarme en tu casa, por todo.
Pedro: De nada Ro, sabes que te
quiero como una hermana más.
Se abrazan emotivamente y Roció
inicia su viaje hacia Bariloche, llevándose lindos recuerdos, llena del cariño
de su familia de Buenos Aires, y habiendo dejado a su primo bien aconsejado y
con una pareja en formación.
Lo que quedaba de la semana se les
pasa muy rápido a ambos.
Pau, junto con Valen y Jose
organizan varias cosas para hacer en la despedida de Barby, algunos juegos,
bingos musicales, papelitos para jugar al dígalo con mímica, Valen llevaría el
Pictionary que tiene. También, contando con el aporte de dinero de los chicos
van de shopping y le compran lindos regalitos para que decore se nuevo hogar en
el exterior y siempre los tenga presente a todos.
Hernán tiene otra muy buena idea
para la noche, la cual le comenta a Pedro y Santi que encantados acceden a
ayudarlo, pero mantendrían la sorpresa para las chicas.
------------------------------------------------------------------------------------------------------------
Llueve, siento que llueve, y da la casualidad que esta vez justo andas por aquí ♪
Espero que si están aburridos y encerrados debido a la DIVINA lluvia de sábado por la noche el cap los entretenga unos minutitos.
Besulis a todos ♥
Agos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario